Agua roja en el Río Rímac: denuncias apuntan a lavanderías y fábricas textiles en Campoy y Huachipa
A tres días de que se reportara una coloración rojiza en las aguas del río Rímac, hasta el momento no se ha dado una explicación oficial sobre la causa de este fenómeno que alertó a la ciudadanía. Mientras las autoridades continúan sin ofrecer respuestas concretas, nuevas pistas apuntan a la posible contaminación por parte de la industria textil en la zona.

Vecinos de la zona han denunciado en el programa Ocurre Ahora de ATV Noticias que este tipo de situaciones no son aisladas, asegurando que el agua del río ha presentado diversas tonalidades en ocasiones anteriores. “Siempre me he topado con el río de color, entre azul oscuro a veces negro y a veces con lavaza (...) Sé que hay lavanderías que están pegadas hacia hacia el margen (del río), en Campoy y en Huachipa”, mencionó un lugareño.

Durante un recorrido en la ribera del río, se encontraron retazos de tela de color rojo y rosado esparcidos cerca de viviendas que funcionan como talleres textiles en Campoy y Huachipa. Esta es la prueba de una nueva hipótesis que ha surgido: las lavanderías de la industria textil suelen verter residuos tóxicos directamente al río.

Expertos advierten que los desechos tóxicos provenientes de estas fábricas pueden generar efectos negativos en la salud de las personas, como problemas en la piel y trastornos estomacales. “Estas pueden generar que el agua no sea completamente potable o sea agua que no se puede usar para beber. La degradación de la calidad del agua es importantísima”.

Por su parte, el Servicio de Agua y Alcantarillado de Lima (Sedapal) ha descartado cualquier responsabilidad en la situación y aseguró que el suministro de agua potable en Lima y Callao no se ha visto afectado. “No hemos encontrado ninguna variación en la calidad del agua que distribuimos. La población puede estar tranquila”, señalaron.

Además, indicaron en las bocatomas Atarjea y Huachipa, el río Rímac presenta “la turbidez habitual de la temporada”, sin registrar coloraciones inusuales que puedan comprometer el proceso de abastecimiento.