Considerado el observatorio solar más antiguo de América y uno de los dos lugares en el mundo antiguo que han incorporado un calendario de horizonte solar completo, el complejo arqueológico de Chankillo acaba de ser declarado por la Unesco como Patrimonio Mundial.
Ubicado en Casma, Áncash, a unos 300 kilómetros al norte de Lima, fue creado–según registros históricos- entre los años 500 y 200 a. C. para regular festividades religiosas y realizar observaciones astronómicas, siguiendo el movimiento anual del sol.
Obra maestra
Según indicó la Unesco, este complejo –hecho de piedra- cuenta con un centro ceremonial, una plaza y 13 torres alineadas desde el norte al sur, construcciones edificadas en un paisaje desértico y con características naturales que en conjunto “funcionan como un calendario solar perfecto, usando marcadores que permiten observar el desplazamiento del sol a lo largo del horizonte durante todo el año”.
Asimismo, el organismo internacional reconoció a Chankillo como una obra maestra no solo de la astronomía, sino de la ingeniería y la arquitectura. Según investigaciones, las mediciones que realizaba este observatorio sobre los equinoccios, solsticios y/o cualquier fecha del año, tenían un margen de error de solo uno o dos días, sirviéndose del ciclo solar y un horizonte artificial.
Cabe resaltar que este nuevo Patrimonio Mundial, alberga un templo fortificado que está rodeado por tres murallas en lo alto de una colina. Además, está el observatorio y el espacio público ceremonial y las trece torres, señalizadoras de la trayectoria solar en la cima de otra colina. Para apreciar esta dinámica, los visitantes tienen que estar ubicados en el templo al amanecer.
Destinos cercanos
Si ya te encuentras en Casma, no dejes de visitar el Complejo arquitectónico de Sechín. Con construcciones de adobe y piedra, cuenta con el Museo de sitio Max Uhle que brinda información sobre las principales culturas prehispánicas que se asentaron en la región: Moche, Wari, Chimú, Casma e Inca.
Cerca de este destino en el Valle de Supe, en Barranca-, se encuentra Caral, la ciudad más antigua de América y también considerada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco. En su interior cuenta con pirámides, templos, espacios residenciales y un área de geoglifos. Una de las características de esta sociedad está en la construcción de canales de irrigación, canalizando la dirección del viento para que el agua llegue a las zonas más bajas y pueda usarse en las labores domésticas.
Con este reconocimiento, Áncash suma un tercer destino como Patrimonio Mundial. El complejo arqueológico Chavín (1985) y el Parque Nacional de Huascarán (2014), completan la lista.
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