Una niña de 13 años presentó este miércoles una demanda en una corte federal contra el gobierno del presidente Donald Trump, por haberla enviado de regreso a su país de origen, donde su vida peligra, en violación al debido proceso legal en Estados Unidos.
La ACLU, la organización humanitaria Oxfam y otros grupos de derechos civiles representan a la menor en la demanda, en la que aseguran que la orden de la administración Trump que restringe la inmigración en la frontera invocando la Ley del Servicio de Salud Pública por la pandemia de covid-19 es "ilegal".
La niña, a la que solo identifican como G. Y. J. P., llegó sola a la frontera de EE. UU. huyendo de las pandillas que habían hecho que su madre, una expolicía, tuviera que dejar El Salvador cuando se negó a cooperar con el grupo.
Señalan además que la madre, que ahora vive en Nueva York, fue blanco de las pandillas salvadoreñas por su negativa a cooperar con ellas, por lo que se vio forzada a huir rápidamente.
Al llegar a EE. UU. se le otorgó protección legal y su hija intentó unirse a ella cuando las pandillas comenzaron a amenazar también su vida.
Sin embargo, pese a que la menor mencionó a las autoridades lo ocurrido, informarles que su madre residía en EE. UU. y entregarles su número de teléfono, los agentes no llamaron y, en su lugar, la regresaron sola a El Salvador, donde se esconde, alegan los demandantes.
Las autoridades migratorias estadounidenses no celebraron una audiencia de su caso, violando el debido proceso legal, afirmaron las organizaciones en un comunicado conjunto.
Protección a los niños
Destacaron que según los antiguos estatutos de inmigración que protegen a los niños y a quienes buscan auxilio, G. Y. J. P. debió haber sido enviada a un refugio hasta que fuera entregada a su madre y haber tenido un proceso justo para determinar su derecho a la protección, lo que le habría permitido reunirse permanentemente con su madre.
"El gobierno de Trump se esconde detrás del covid-19 como una forma de devolver a los niños a un grave peligro. Al igual que la horrible política de separación familiar de Trump, los tribunales deberían concluir que este último ataque contra niños es ilegal", afirmó el abogado de ACLU, Lee Gernt.
Esta es la segunda demanda que por el mismo motivo presentaron la ACLU y Oxfam en las últimas horas en contra del uso de normas de salud para expulsar a menores de edad sin el proceso debido.
En la primera, el juez Emmet Sullivan, del distrito federal de Columbia (Washington), detuvo la deportación de un hondureño de 16 años, dando tiempo a la organización para proseguir con su demanda sin que el menor fuera deportado.
ANDINA